Es una muy buena pregunta. Me la hago cada día y no soy capaz de responderla nunca. Nadie que realmente se pare a pensar la respuesta creo que pueda darla. Pero lo que sí te puedo contar es qué he hecho.
Nací en Zamora en 1998. Pasé una infancia normal en Benavente. Y nunca fui buen estudiante. Pero lo que sí era -y soy- es bastante curioso. Las cosas de clase no me interesaban mucho, pero cuando algo llamaba mi atención, me capturaba por completo.
En 2017 tuve mi primer encuentro con la fotografía. Este es un buen ejemplo de lo que decía antes: salí a pasar el rato con una cámara que mis padres tenían por casa, intenté hacer fotos a unos patos que me encontré en un río y, como no pude, me obsesioné durante muchas semanas en conseguir hacer esa fotografía. Empecé a investigar, aprender, trastear… todo lo que me pudiese ayudar a hacer esa fotografía. Empecé a ver el trabajo de fotógrafos de naturaleza, tutoriales, vídeos… Y esas semanas de obsesión hicieron que me enamorase de la fotografía.
En 2019 salí fuera de casa a estudiar. Fui a Salamanca, una ciudad que formará parte de mi corazón siempre. Allí estudié fotografía, vídeo e iluminación. Y también allí empecé a experimentar con la cámara más allá de lo que había hecho en ese momento. Descubrí la fotografía conceptual de la mano de Chema Madoz gracias a Carmen, mi profesora. Ese descubrimiento me abrió las puertas a poder fotografiar más allá «de lo que existe».
Al terminar de estudiar estuve viviendo en Extremadura, una tierra que también me marcó para siempre. Finalmente, de vuelta a Benavente, he empezado a trabajar en futuros proyectos fotográficos, tratando de innovar, romper y evolucionar.
Todo esto no creo que responda a la pregunta de quién soy. Pero si responde a dónde estoy.